6 consejos de comunicación de gran alcance
4. Activa el poder de la pausa
¿Recuerdas la temida pausa de la que hemos hablado antes? A veces - sólo a veces - puede ser una herramienta útil de comunicación.
Cuando un entrevistador profesional siente que un sujeto está ocultando algo sobre un tema en particular, a menudo va a usar el poder del silencio al final de la respuesta para extraer más información.
Si te resistes a la tentación de responder muy rápidamente a su respuesta, descubrirás algo casi mágico. La otra persona se expandirá, ya sea en lo que ya ha dicho o que vaya a ir en una dirección diferente. De cualquier manera, está ampliando su respuesta, y se obtiene una visión más clara de lo que tiene en la cabeza y el corazón.
Intenta contar hasta tres - o hasta cinco, si puedes soportarlo - después de que responda a una pregunta difícil o reflexiva. Este método puede parecer agonizante al principio, pero - utilizado con empatía - funciona de maravilla para desarrollar una relación más profunda entre dos personas.
Nuestra tendencia natural es llenar el silencio pero la pausa también puede funcionar como un juego de poder en un escenario más difícil como, por ejemplo, en una negociación salarial.
5. Cultiva la curiosidad, el enfoque de Dale Carnegie
Todas estas técnicas están probadas y son verdaderas, pero realmente no funcionan sin una cualidad sencilla por parte del entrevistador: la curiosidad.
Una verdadera pasión por aprender más acerca de los que te rodean va más allá de cualquier truco o incluso de las más pulidas habilidades de comunicación.
Puedes cultivar la curiosidad en tu vida diaria al observar más detalles, ahondar en las ideas que capten tu interés y estar alerta ante los que te rodean y lo que hacen.
Como explica Dale Carnegie, la belleza de la curiosidad es que te hace casi irresistible a todos a tu alrededor.
"Se puede hacer más amigos en dos meses al interesarse en otras personas de lo que puedes lograr en dos años tratando de conseguir que otras personas estén interesados en ti."
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6. Práctica la "Suspensión del Ego": el poder de olvidarte de ti mismo
Por supuesto que a todos nos gusta pensar en nosotros mismos como estudiantes atentos, curiosos del mundo, pero hay una cosa que se interpone en el camino: nuestros propios egos.
No es culpa nuestra, estamos cableados de esa manera. Después de todo, hablar de nosotros mismos que nuestro cerebro se sienta tan bien como con el dinero o el sexo.
Por eso la suspensión ego es tan esencial para el cultivo de la especie de curiosidad que te permite conectar con los demás. Robin Dreeke, instructor principal en el Centro de Formación de Contrainteligencia del FBI en entrenamiento en habilidades interpersonales y de comportamiento, explica:
"La mayoría de las veces, cuando dos individuos se involucran en una conversación, cada uno espera pacientemente a que la otra persona puede hacer con cualquier historia que está diciendo. Entonces, la otra persona le cuenta su propia historia, por lo general sobre un tema relacionado y muchas veces en un intento de tener una historia mejor y más interesante. Las personas que practican la buena suspensión de ego continuarían animando a la otra persona para seguir hablando de su historia, dejando a un lado su propia necesidad de compartir lo que ellos piensan que es una gran historia".
En la próxima reunión que asistas, resiste la tentación de contar una historia y en cambio céntrate en hacer preguntas al que está hablando sobre el tema del expone. Puede ser frustrante al principio, pero puedes acabar sorprendido por el resultado final.
Como dice el autor Tom Wolfe, "el mundo está lleno de personas con la compulsión de que quieren contarte sus historias. Quieren decirte cosas que no conoces. Son algunos de los mayores aliados que tiene cualquier escritor."
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